Capítulo 8 “Ángela”

Capítulo 8 “Ángela”: Jill disparó contra los zombies y Leon consiguió rescatarla. Los tres corrieron por una calle hasta ocultarse en un bar. Después de asegurarse de que no había zombies le preguntaron por su indentidad. Se llamaba Ángela, y era la hija de uno de los trabajadores importantes de Umbrella que habían evacuado. Jill y Leon fueron a la cocina. Leon quería utilizar a la niña para salir de la ciudad pero Jill no estaba de acuerdo. Jill cogió a Ángela y volvieron a la calle. Leon cogió una botella de whisky y comenzó a beber. En el exterior, Mark continuaba en los alrededores de la ciudad esperando para activar al monstruo que habían liberado en el hospital. Tras el caos en la ciudad, era el momento oportuno para probar todo el potencial de Némesis. Uno de los trabajadores de Umbrella buscaba con su ordenador a su hija para salvarla.

Capítulo 7 “Expedientes”

Capítulo 7 “Expedientes”: de regreso a la ciudad, Leon y Jill luchaban contras los zombies mientras regresaban al hospital en busca de expedientes secretos de Umbrella. En el hospital comenzaron a escuchar unas pisadas fuertes. Se escondieron en una habitación y vieron una especie de monstruo más parecido a un monstruo que a un hombre. No sabían lo que era, pero ahora tenían que centrarse en encontrar los expedientes. Descubrieron unos experimentos en salas especiales con el Virus-T, un virus capaz de regenerar las células muertas. Lo habían estado probando en el hospital. La mujer era una de las dos personas a las que habían infectado, la otra era el monstruo que habían visto. La única solución para poder vengarse de Umbrella era escapar de la ciudad y encontrarles, pero no iba a ser una tarea fácil. Cuando salieron del hospital descubrieron a una niña corriendo.

Capítulo 6 “Las Puertas”

Capítulo 6 “Las Puertas”: la única explicación era que la Corporación Umbrella estaba detrás del virus que estaba comenzando a propagarse por Raccon City y convertía a la gente en zombies. La única solución era ir al puente e intentar interrogar a Mark, uno de los supervisores de la Colmena, la instalación subterránea de Raccon City. Cuando llegaron al puente descubrieron que la población había regresado para intentar escapar de la ciudad después de ver cómo los zombies comenzaban a propagarse por la ciudad. Leon y Jill consiguieron llegar hasta la parte de delante y comenzaron a gritarle a Mark sobre que sabían lo que estaba haciendo. Mark ordenó cerrar las puertas del puente y amenazaron con disparar a la gente si no regresaban a la ciudad. Tras los primeros disparos al cielo, la gente comenzó a correr hacia la ciudad. Jill y Leon tenían que pararle los pies.

Capítulo 5 “Propagación”

Capítulo 5 “Propagación”: el comisario de policía no daba a basto dentro del hospital, ya eran veinte los infectados que tenían los mismos síntomas. Los veinte consiguieron salir del hospital mordiendo a otras personas. El contagio había comenzado. La población regresó a sus casa después de la noticia del simulacro. Cuando Jill y Leon regresaron al hospital descubrieron horrorizados que el virus se había comenzado a propagar. Jill entró de nuevo en el hospital para buscar en los archivos algún ingreso parecido en los últimos días y no encontraron nada. La única forma de parar el virus era descubrir cómo se había contagiado la mujer. Los dos se acercaron a casa del marido de la mujer para preguntarle sobre su profesión. Éste les dijo que su mujer era científica y trabajaba en la Corporación Umbrella, concretamente en las instalaciones subterráneas de Raccon City.